DIA UNO
Unas semanas más tarde luego del último entrenamiento de Khel, este decidió mejorar su condición física. Había recibido un paquete de pesas gracias a su hermano, por lo cual decidió darle algo de utilidad.
Colocandose ambas pesas en sus piernas, comenzó a caminar por el bosque como un calentamiento. La caminata se extendió por horas, descansando continuamente por el agotamiento que generaba tener tanto peso en su cuerpo.
Cuando la noche salió y el Sol desapareció, el cuerpo de Khel estaba consumido totalmente. Una vez de vuelta en la cabaña, Khel comio algo y descanso por el resto de la noche.
UNA SEMANA DESPUES
Era increible lo que había sucedido en esta semana. Su cuerpo se había adaptado totalmente al peso agregado, ahora incluso podía caminar mucho más rápido. Poco a poco comenzaba a correr para poder adaptarse al peso, a una gran velocidad...
Khel, descansó por la tarde y a la noche continuó con el entrenamiento. Una vez en el punto más alto de una montaña, comenzó a bajar corriendo lentamente. Pasada unas horas, logró llegar hasta el punto más bajo y allí comió algo y descansó.
UN DIA DESPUES
Aquella mañana Khel se levantó temprano para volver a subir por la montaña. Esta vez, las pesas fueron colocadas en sus brazos y poco a poco comenzó a escalar la montaña. Al cabo de unas horas, Khel se encontró con una pequeña superficie y allí descansó por unas horas.
Unas horas más tarde, Khel comió algo para poder seguir entrenando sin dificultad. Por el resto del día, poco a poco fue escalando la montaña.
DOS DIAS DESPUES
Por fin Khel había logrado conseguir escalar toda la montaña, y poco a poco podía sentir como tanto su fuerza y su velocidad habían incrementado...