Luego de varias semana de caminar en círculos por el bosque, Khel decidió volver a su casa. Tenía que liberar toda la confusión en su mente y la única forma era entrenando. Fue a buscar a Rack a su casa para pedirle ayuda. Este le explicó sobre una técnica muy poderosa, pero tenía que saber utilizarla correctamente... una técnica llamada Kasumi Juusha no Jutsu.
Rack se colocó frente a Khel y hizo lentamente los sellos pronunciando Kasumi Juusha no Jutsu y poco a poco, comenzaron a salir muchos cuerpos del suelo con la forma de Rack. Khel, impresionado comenzó a atacarlos, pero por cada uno que destruía, otro dos aparecían.
Durante unos minutos Khel practicó los sellos una y otra vez. Cuando lo había dominado completamente llamó a Rack para probar la técnica. Una vez que ambos estuvieron frente a frente, comenzó a hacer los sellos y pronunció Kasumi Juusha no Jutsu y enviando ondas de chakra a la mente de Rack, este observó como un solo cuerpo comenzó a salir de la tierra, pero en pocos segundos volvió a mirar a Khel demostrando que la técnica había fallado.
Frustrado, volvió a hacer los sellos y pronunció Kasumi Juusha no Jutsu y nuevamente enviando ondas de chakra a la mente de Rack, este vio como cuatro cuerpos comenzaban a salir del suelo. Rack, golpeando rápidamente a uno, este se destruyó pero no volvió a aparecer más... por lo cual la técnica aún no estaba completa.
Khel agotado, descansó por el resto de la noche.
Al día siguiente volvió a intentarlo... respirando profundamente, hizo los sellos y dijo Kasumi Juusha no Jutsu, y enviando ondas de chakra a la mente de Rack, este comenzó a ver como salian del suelo más y más cuerpos. Y por cada uno que el destruía, otros dos volvian a crearse...
La técnica estaba completa.